lunes, 13 de junio de 2011

TAN BIÓNICA

“Somos cuatro obsesivos”


Obsesionario es el nuevo CD de Tan Biónica, que esta vez ofrece un inventario sobre el desencuentro. De verlos tocar en el Luna pasaron a trabajar con Pepe Céspedes y Osky Righi, ex Bersuit. “Tocaríamos gratis, pero si nos pagan, mejor”, se divierten. Texto por Marcelo Maccio Villegas.


Mientras la Ciudad se envuelve en velocidad y calor, en uno de sus barrios, en Palermo –Gorriti al 4000–, la sala de ensayo de Tan Biónica es una burbuja en la que se respira tranquilidad y felicidad. Sucede que la banda acaba de lanzar Obsesionario, y desde la concepción del material hasta la actualidad, todas fueron buenas noticias.

NU se acercó hasta la sala de ensayo y dialogó con Sebastián Seoane (guitarras) y Diego Lichtenstein (batería), que integran la banda junto a Chano Moreno Charpentier (voz) y Bambi Moreno Charpentier (bajo).

–¿Por qué Obsesionario como nombre del disco?
–Es una palabra que no existe, la inventamos para el título de esta obra de 12 historias o capítulos sobre el desencuentro. Obsesionario es un inventario de obsesiones.

–¿Antes de la grabación ya estaba la idea de hacer un “obsesionario” o apareció una vez grabado?
–Fue más al finalizar el disco; en su construcción se fue apuntando para ese lado. Nos dimos cuenta de que todos los temas trataban esta temática y fueron compuestos en una misma situación de tiempo y espacio, a diferencia de Canciones del huracán (NdR: el disco anterior de la banda), que fue autogestionado y un compilado de cosas hechas durante años.

–¿Cuándo y cómo fue compuesto Obsesionario?
–Desde que terminamos el disco anterior hasta que lo grabamos. Ahora que lo sacamos ya estamos componiendo para el que viene. Obsesionario arrancó a componerse en 2008, y cuando salió a la calle a nosotros ya nos quedó viejo. Incluso “Ella”, un tema de este disco, lo tocamos en la presentación del disco anterior.

–¿Con ese delay no pierden la emoción del disco nuevo?
–Pasa que al no tener la infraestructura, en ese momento pecamos de ansiosos: salimos a tocar lo nuevo, para mostrar que no estábamos estancados. Hubo una desprolijidad, también la llegada de Canciones de huracán se atrasó, entonces Obsesionario ya estaba pensado pero había que darle espacio al otro disco.

–Con esa estructura de la compañía atrás, ¿trabajan más cómodos?
–Uno trabaja mejor y hace mejor lo suyo; lo nuestro, que es componer. Cuando uno se enfoca por completo en lo que sabe hacer, ahí es infalible. Igual somos cuatro personas muy obsesivas y no podemos delegar todo.

–¿Cómo llegaron a trabajar con Pepe Céspedes y Osky Righi? ¿Cómo fue ese trabajo?
–Fue un sueño para nosotros. Fuimos muy fanáticos de Bersuit y un año antes de trabajar con ellos los estábamos viendo desde la tribuna del Luna Park. Nos presentaron a Cristian, manager de Bersuit y ahora nuestro también, acercamos un demo a la compañía y nos dijeron que querían hablar con nosotros. Después nos preguntaron quién nos gustaría que sea el productor y dijimos “Pepe y Osky”, y ahí nos dijeron “olvídense”.

–Y después se terminó dando.
–Estábamos en este mismo lugar (se dan vuelta y miran como si revivieran el momento) y ellos cayeron para hacer la preproducción. Nos dijeron que íbamos a grabar en Del Cielito, todas cosas que para nosotros eran muy lejanas. Ellos son superhumildes, nos abrieron sus puertas, nos prestaron instrumentos, conocimos a sus familias; colaboraron Dany y Cóndor en el disco, compartimos escenario… todo muy buena onda.

–¿Cómo ven la escena local y qué lugar ocupa Tan Biónica en ella?
–Empezaron a desaparecer las megabandas, que quizás eran de gente de 40 para arriba, y no hay muchas bandas jóvenes, de nuestra edad, en una buena posición. Nosotros tenemos una forma rica o compleja de contar las historias y a nivel sonoro se vienen haciendo siempre cosas parecidas; y nosotros por la edad que tenemos o por las experiencias, tenemos un sonido más aggionado, nuevo. No tenemos prejuicios a la hora de emparentarnos con distintos tipos de música, bajo el manto de Tan Biónica, con sintetizadores, guitarras y la voz de Chano que le mete un carácter particular.

–¿Se pusieron algún objetivo al momento de grabar el disco?
–El objetivo es infinito. Nos ponemos metas a corto plazo: hicimos una, después dos Trastiendas, después quisimos llenar La Trastienda sold out… son pasos cortos pero firmes, no tiros al aire. El objetivo del momento es la gira nacional por la costa y el interior.

–¿No piensan en la plata al momento de componer y grabar?
–Todos tenemos que sobrevivir. Es nuestro trabajo, nos encanta tocar y no hay nada que nos guste más– hace una pausa y cuenta que viajando, sin saberlo, un taxista le dijo que le gustaba la banda mientras un tema sonaba en la radio; dice: “Esas cosas garpan el día y el mes”–. Tocaríamos gratis, pero si nos pagan, mucho mejor, no tiene precio.

–¿Con qué momento o instante de la grabación se quedan?
–(Se miran dos segundos y sin cruzar palabra saben que coinciden) Pepe tocando la acústica, grabando “Obsesionario en la mayor”. Verlo tocar con esa paz, esa pasión y la musicalidad en los dedos... fue el único momento en que todos estuvimos callados mirando cómo tocaba, le salía todo del alma y nos dimos cuenta de que si él hacía eso con una canción nuestra, algo estábamos haciendo bien.



Nota original: diciembre 2010 http://www.noticiasurbanas.com.ar/info_item.shtml?sh_itm=5ff77b7208a2d744057068e83f8f2af5

1 comentario:

Anónimo dijo...

Me parece muy buena la nota.. Me informe cosas de la banda que quizas no sabia.. Adoro a Tan Bionica! Euge.