"Extrañamos nuestros primeros conciertos"
Antes de una gira por todo el país en la que presentarán su CD+DVD, La Vela Puerca rememora sus épocas pasadas con nostalgia y adelanta lo que será su nuevo disco de estudio, "más rockero, directo y simple".
La Vela Puerca es, por sus orígenes, una banda uruguaya; por adopción, una banda argentina; para conformar a todos, una banda rioplatense. Los fanáticos de cada una de las orillas crecen día a día, y a punto de comenzar una nueva gira por la Argentina, Noticias Urbanas dialogó con Santiago Butler (guitarra).
–¿Cómo se preparan para enfrentar la nueva gira por la Argentina?
–Con La Vela hemos viajado mucho por la Argentina, esta gira es una más, pero estamos con el clima de presentar lo que es el DVD que sacamos (Normalmente anormal), que tiene algunas canciones nuevas. Es algo que nos gusta mucho y lo disfrutamos desde el comienzo, hace once años.
–¿El lugar en el que van a tocar influye en el armado de la lista de temas?
–El lugar se tiene en cuenta y siempre se va cambiando. Si vamos a equis lugar nos fijamos qué tocamos antes, qué teníamos ganas de tocar, qué nos dijo la gente, qué nos pidieron, si hay alguno que quiere tocar algo particular… lo vamos cambiando. No es lo mismo estar en un lugar que estuvimos hace cuatro o cinco meses que en uno que no fuiste nunca.
–¿Hay temas que ya no les gusta tocar en vivo?
–Los conciertos no van de la mano de los discos. Nosotros sacamos El impulso, y no te voy a decir que tocamos las canciones del disco, porque sabemos que el disco se dio en un momento especial y tiene un ambiente especial; es un disco para escuchar, no es un disco agitador. En vivo seguimos tocando canciones del primer disco. ¿Pero la pregunta era…?
–Si hay temas que ya no les gusta tocar.
–Ésa es una discusión que tenemos a veces, por que uno dice “toquemos tal canción”, y otro dice, “ésa en vivo rinde poco” o “es más para otro ámbito”. Así que hay discusión. Algunos temas rinden en vivo y otros precisan de un ambiente y a veces no son momentos para hacerlos, igual algunos siempre tienen que estar.
–Cuando salen de gira por Europa, ¿se sienten embajadores rioplatenses?
–Empezamos a ir a Europa hace seis años. Trabajábamos con Universal en Uruguay y la Argentina, y ellos nos editaron De bichos y flores en Alemania. Ahí surgió la posibilidad de ir, y en ese momento sí nos sentimos embajadores, era llevar un pedazo de Uruguay y eso te hace sentir así. Después, cuando fuimos a España, sin dudas es más como en casa, porque hay más uruguayos y argentinos y por el idioma. Lo que se siente en esos lugares es que para el uruguayo que está allá es muy emocionante, el que la está peleando se junta y se genera una identidad, viene una gran nostalgia y lo mismo pasa con los argentinos.
–El DVD repasa la historia de la banda, ¿cómo se siente girar la cabeza y mirar el camino recorrido?
–Estábamos hace bastante tiempo queriendo sacarlo y es bastante emotivo. Cuando Agustín Ferrando Trenchi (dirección y edición) nos llamó, nos juntamos en la sala, pusimos un proyector y nos mostró el adelanto, la gran mayoría de nosotros nos emocionamos juntos y ahí caímos y dijimos: “¡Pa, qué historia tenemos, de tantos años!”. Había una historia para contar, y nos pasó a nosotros, pero le podría haber pasado a cualquiera. Y quedó bien, es muy emotivo. Nos pone orgullosos de que haya tanto filmado. Es un documento que no nos muestra como una banda de “mirá qué bien que nos fue”, también muestra mucha vivencia interna de amigos y ves que no todo es tan bueno y lujoso. Y hay que viajar, convivir, muchas cosas.
–Después de tanto camino andado, ¿qué cosas extrañan o ya no causan tanto placer?
–La primera gira alemana de dos meses, a la que fuimos sin técnicos y tuvimos que hacer bastante y todo era nuevo, la disfrutamos mucho. Ahora una gira tiene su parte rutinaria, sabes qué puede llegar a pasar. Es como un trabajo, va cansando el tema de viajar. Algunos tenemos hijos y el viajar separa de la familia y eso entra a pesar un poco. Que extrañemos los primeros conciertos que hacíamos, o los festejos gratis, celebrando el cumpleaños los 24 de diciembre, hasta el año 10.
–¿Por que dejaron de hacerlos?
–Nos significaba mucha presión, lo hacíamos nosotros y eran muchos gastos de todo tipo. No lo pudimos hacer más y lo extrañamos, era como una costumbre. Iba creciendo año a año, el último año en el parque Rodó creció tanto que no se podía manejar ya. Lo producíamos nosotros y era mucha responsabilidad. Este diciembre estamos viendo si lo volvemos a hacer.
–¿Ya están trabajando en un nuevo disco de estudio?
–Hoy estuvimos juntos y estamos tirando ideas, tenemos una lista pequeña de canciones y proyectos, melodías. Le estamos dando forma a todo. Queremos grabar un disco nuevo, aunque no sabemos si saldrá este año. Queremos renovarnos y salir de El impulso, que es un disco raro. El nuevo disco no creo que sea tan introspectivo como El impulso.
–Varias veces remarcaste lo raro de El impulso, ¿por qué?
–Todos los discos son diferentes. La Vela no tiene un estilo definido y lo que manda son las canciones. Depende de las canciones que traiga el Enano, que es el principal compositor, hacia dónde va a ir la banda; y él es muy honesto con lo que siente. En El impulso se dieron esas cosas por el momento que vivía él y algunos de nosotros. No es un disco muy radial, pero sí es para escuchar en tu casa, profundo, introspectivo y con mucha música. Fuimos honestos con el momento que vivíamos. Si quisiéramos ser comerciales… La verdad es que no nos faltaron oportunidades para serlo.
–El nuevo disco estará lejos de introspecciones y delicadezas entonces.
–Es un disco rockero. Yo me animaría a decir que no es tan melancólico y que viene con una energía más rockera. Es más directo, más simple.